He participado en dos de los paseos ciclistas nocturnos que se organizan en Guadalajara (México) y me he dado cuenta de que la ciudad no es TAN grande. La percibimos grande por el tiempo que
desperdiciamos empleamos en trasladarnos pero, en realidad, las distancias no son muy grandes.
Sé que no soy el único que quiere que en esta ciudad se le dé su lugar a la bicicleta (y al usuario de bicicleta) para que la población lo considere como un medio de transporte seguro y eficiente.
Sigamos esperando...